-Te acepta como eres y te aprecia por ti mismo. -Esta junto a ti cuando lo necesitas. -Respeta tu forma de pensar y te respeta y valora siempre.
-Es tu amigo aunque te abandonen, -Te comprende también en los momentos de enfado. -Jamás te traiciona ni habla mal de ti a tus espalda. -No es posesivo, te deja ser tu y ejercer tu libertad. -Es compasivo y fiel y jamás te aprecia por interés. -Sabe tanto perdonarte como pedirte perdón.
-No admite jamás chismes ni cotilleos sobre ti.
-No es acaparador ni te quiere para si de una manera exclusiva.
-Te permite que estés abierto a otras amistades. -Sabe salvar la amistad después de los enfados mutuos. -Sabe guardar secretos y es sincero contigo mismo.
-No gasta bromas pesadas que puedan molestarte,
-Te quiere tanto para lo bueno como para lo malo.
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