La felicidad humana generalmente no se logra
con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.
De aquel que opina que el dinero puede hacerlo todo, cabe sospechar con fundamento
que será capaz de hacer cualquier cosa por el dinero.
Tómate tiempo en escoger un amigo, pero sé
más lento aún en cambiarlo.
Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo,
involúcrame y lo aprendo.
Un padre es un tesoro, un hermano es un consuelo: un amigo es ambos.
Invertir en conocimientos produce siempre los
mejores beneficios.
El hambre espía en la casa de los pobres,
pero si la habitan personas trabajadoras, no
se atreve a entrar.
Toma consejo en el vino, pero decide después
con agua.
Carecer de libros propios es el colmo de la
miseria.
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