Aprende a convivir contigo mismo en soledad: conócete, apréciate, quiérete, disfruta de ti mismo, y aprenderás a convivir con tu prójimo
Aprende a dar gracias sinceramente por las cosas sencillas y acabarás mirando las cosas difíciles como oportunidades que agradecerás.
Aprende cada día conceptos, hábitos y nociones que te ayudan a avanzar y a ser feliz. Reorienta y desaprende los que te lastran y amargan.
Busca el entusiasmo a tu alrededor, comparte la alegría, haz tuyo el gozo de los demás, interésate por aquello que lo motiva.
Serás feliz.
Considera el buen humor como un deber que tienes para con todos: familiares, amigos, compañeros y todos aquellos con quienes te cruzas.
Cuando discutas con alguien, no le consideres falto de inteligencia o de buena voluntad ni mines su dignidad.
El tonto malvado serías tú.
Cuando hables, piensa de dónde proceden tus palabras. ¿del cerebro, del hígado, del estómago, del aire, del corazón?
Cuida lo que dices.
Cuando preguntes, procura que tus preguntas sean razonables, que sirvan para averiguar algo y para aclarar un hecho o sus circunstancias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario