No siempre hay que esperar que todo sea como nosotros queramos.
No nos acostumbremos a consultar siempre en nuestras decisiones decidir nosotros mismos.
Date permiso para equivocarte.
La felicidad no consiste en hacer lo que uno quiere, sino en querer lo que uno hace.
Si tu casa es un infierno empieza tu por ser un ángel.
No divulgues lo que te cuentan de otro, si es desfavorable, y todavía harás mejor si procuras no oírlo.
No preguntes por saber que el tiempo te lo dirá es mas bonito saber sin tener que preguntar.
No pretendas cambiar al otro , fíjate en lo que hace bien.
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