Ya muy de noche regresaba yo a casa por el mismo camino que he seguido durante los ultimos
tres años.
Como soy ciego; me guio por ciertos objetos que
tanteo con mi baston. Sin embargo,al parecer habian cortado un matorral que hasta esa mañana
me habia servido de punto de orientacion.
No encontre a quien preguntar y me perdi.
Al cabo me encontre en un puente que llevaba a la
poblacion vecina. Me volvi para desandar el camino. siempre con la ayuda del baston;cuando oi una voz femenina que me preguntaba:
-¿Se ha perdido usted?
-Si señora- creo que estoy perdido.
-¿A donde quiere ir?-Volvió a preguntarme, y
entonces note que le temblaba la voz. Le di mis señas y me acompaño hasta la puerta de mi casa.
No se como agradecerle- le manifesté.
-Al contrario soy yo la agradecida- Me dijo ella ya
con voz mucho mas serena.
-No comprendo.
-Mi marido me abandono hace una semana.
Hoy fui al puente para tirarme al rió...
Pero ya no lo haré. Buenas noches.
-Y desapareció.
Cuando salimos en auxilio de alguien, Dios sale en el nuestro. Por el amor existimos y para amar
vivimos.
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