CUENTO

 El  valor  de  una  sonrisa.

Un  día  el  pequeño  Chuen  penetro  en  un  bosque y  vio  una  casa  de madera, en  medio  de  un  silencio total .Se  asomo  y vio  a  un  anciano  de  barba tendido  en  el  lecho.

-Entra  niño le dijo  el  anciano, te he oído  llegar desde  un kilometro  al  menos.

El niño  entro  y le   pregunto  ¿Cómo  siendo  tan viejo  me has oído desde tan  lejos?

-Es que me estoy  muriendo y  cuando  se es  tan  viejo conviene  familiarizarse  con  la muerte y el oído  se hace  muy  sensible.

Y  siguió: ya no tengo  necesidad  de  ver a personas ni  de oír   charlas con personas  vanas lo que  necesito  es  tranquilidad  por eso  me he  retirado  aquí . 

¿Pero  me  has  invitado  a  entrar?. Es verdad  pero solo tenia  nostalgia  de una  sonrisa. ¿me la  quieres  dar? Chuen  sonrió levemente y  el  viejo  sabio  se  murió  feliz

Una  sonrisa  puede  salvar  una vida  y  alivia  tanto  al  que la  recibe  como al  que la da.