Nunca creas feliz a nadie que este pendiente de la felicidad. Se apoya en una base frágil quien pone su alegría en lo que sucede: el goce que viene de fuera, a fuera se ira. Por el contrario, aquel que nace de uno mismo es fiel firme, crece, y nos acompaña hasta el fin.
No te pongas en el camino de la tentación, ni siquiera el rey David pudo resistirla.
Para conseguir la paz interior hay que renunciar al puesto de gerente general del Universo.
Ni siquiera un ángel puede hacer dos cosas al mismo tiempo.
Este instante no volverá a repetirse jamás; por lo tanto, todo el bien que pueda hacer, toda la bondad que pueda demostrar a un ser humano, debo hacerlo ahora. No he de diferirlo ni descuidarlo porque no volverá a presentarse jamás.
Deben saber, amigos míos que una de las fuentes mas puras de la felicidad la tienen en su casa, entre la familia entre sus muebles, entre sus libros.
Si no puedes encontrar la verdad en el lugar donde estas, ¿Dónde mas esperas encontrarla?
Anónimo
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