Le preguntaron a un sabio: ¿Quién te guio en el camino? El sabio contesto: un perro. un día me lo encontré casi muerto de sed a la orilla del rio. Cada vez que veía su imagen en el agua se asustaba y se alejaba creyendo que era otro perro finalmente fue tal su necesidad ,que venciendo su miedo se arrojo al agua, y entonces el otro perro se esfumo. El perro descubrió que el obstáculo era el mismo y la barrera que lo separaba de lo que buscaba había desaparecido.
De esta misma manera ,mi propio obstáculo desapareció cuando comprendí "que mi yo" era ese obstaculo. Fue la conducta de un perro la que me señalo por primera vez el camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario