Acordaos de que nunca alcanzareis meta mas elevada que la que vosotros os propongáis.
Como ciudad derribada y sin muros es el hombre cuyo espíritu no tiene riendas.
Los hombres son falsos si conviven con mentirosos, ruines si con avaros, vanidosos si con presumidos y en general se asimilan los vicios de la gente de su intimidad.
El verdadero amigo te socorrerá en la necesidad, llorara si te entristeces, no podrá dormir si tu velas y compartirá contigo las penas del corazón.
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