LA NIÑA CON DOS MANZANAS

Había una vez una niña que se encontraba jugando en el jardín de su casa con dos apetitosas manzanas en sus manos. Las dos eran de color rojo intenso brillante, apenas se diferenciaban entre si. Así de entretenida estaba cuando, de repente, oyó que su madre llegaba a casa del trabajo le grito "Mama le grito estoy aquí en el jardín."                                       La mujer, con ganas de abrazar a su hija, se dirigió al jardín y, al ver a la pequeña sujetando las dos sabrosas manzanas, no pudo reprimir el deseo de probarlas y le pregunto, cariñosamente a la pequeña, si le daba una.

Sin articular palabra, rápidamente mordió una manzana y luego le dio otro gran mordisco a la otra. La mujer se quedo con la sonrisa congelada y trato de no mostrar su decepción.                               Pero para su sorpresa la niña le acerco una de sus manzanas y le dijo. "Toma mamita comete esta que es la mas dulce."                                                  Esta tierna historia nos enseña que no importa cuanta experiencia o conocimientos creemos tener. Nunca hay que hacer juicios porque lo que percibimos puede que no sea real. Ofrezcamos siempre al otro la oportunidad de dar una explicación. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario