Estas palabras -cuenta el joven-suenan en mis oídos como música. Me tranquilice y me sentí vivo. Y entonces oh maravilla, cambie. Y es que solo el amor convierte. Tu no puedes ser malo porque yo te quiero.
Muchos son malos, no crecen, muchos no crecen porque no son bastante amados. El día que vosotros no ardáis de amor, otros muchos morirán de frio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario